Podcast - Más allá del código: habilidades y enfoques para crecer en una carrera técnica.

Empezar una carrera en tecnología puede ser emocionante, pero también abrumador. El ritmo vertiginoso del sector, la cantidad de herramientas disponibles y la presión por estar siempre al día hacen que muchas personas se enfrenten a dudas, bloqueos o falsas expectativas.

En este episodio contamos nuestra experiencia y damos algunos consejos tanto para quienes están dando sus primeros pasos como para quienes buscan reorientar su camino en el sector.

No es necesario saberlo todo

Una de las primeras realidades que hay que aceptar es que nunca vas a saberlo todo. La tecnología es un campo en constante evolución, donde lo más importante no es memorizar, sino aprender a aprender.

Muchos perfiles de desarrollo, al comenzar, sienten el síndrome del impostor: la idea de que no saben lo suficiente o de que no son lo suficientemente buenos para dedicarse a esto. La clave está en entender que equivocarse es parte del proceso y que frustrarse no es señal de incapacidad, sino de aprendizaje.

Uno de los errores más comunes al comenzar, sobre todo en desarrollo front-end, es lanzarse directamente a aprender un framework sin dominar antes los fundamentos del lenguaje.

Este sería el caso de JavaScript, donde destacamos la importancia de conocer bien sus bases antes de pasar a React, Angular o cualquier otro framework. Al final, cuando llega un problema complejo, solo si tenemos una buena base seremos capaces de entenderlo y resolverlo.

Aprender a leer documentación, saber buscar soluciones y desarrollar pensamiento lógico son habilidades mucho más valiosas que memorizar sintaxis.

Las soft skills marcan la diferencia

Comunicar ideas técnicas, explicar decisiones, colaborar bien en equipo o dar buen feedback son aspectos clave en el día a día de un desarrollador o desarrolladora. Estas habilidades muchas veces no forman parte del plan formativo y se aprenden con la experiencia.

La paciencia, la perseverancia y la constancia son puntos clave dentro del sector técnico. También lo es tener una mentalidad de crecimiento, estar abierto a aprender de cada error, seguir formándose y, si es posible, tener proyectos personales, aunque sean pequeños.

Eso sí, sin caer en la comparación constante con otros. Cada persona tiene su ritmo y sus circunstancias.

La importancia de la especialización y la documentación

En el mercado laboral actual lo que más se demanda son perfiles especializados, capaces de aportar profundidad técnica en un área concreta. Saber un poco de todo puede parecer útil, pero en algunos casos puede que no nos permita afrontar retos complejos con solvencia.

Eso no significa cerrarse a otros ámbitos, sino entender que no es necesario (ni realista) dominar todo.

Por otro lado, queremos destacar también la importancia de la documentación, una inversión en claridad, eficiencia y escalabilidad. Documentar bien significa ayudar a tu yo del futuro, a compañeros y compañeras que hereden tu código, y al equipo que te acompaña.

Desde un buen README con instrucciones claras, hasta comentarios estratégicos en el código que expliquen por qué se ha tomado una decisión técnica concreta, todo suma. Recomendamos herramientas como DocuSaurus o JSDoc para organizar la documentación.

¿Qué significa ser senior?

Más allá de los años de experiencia, ser senior implica liderazgo técnico, capacidad de tomar decisiones importantes sin necesidad de tener un rol formal de gestión, visión de negocio, y sobre todo, ser un multiplicador del valor del equipo.

Un perfil senior es aquel que ayuda a crecer al resto del equipo, que anticipa riesgos, gestiona la deuda técnica y sabe decir “no” cuando es necesario. No se trata solo de escribir mejor código, sino de hacer que todo el equipo funcione mejor.

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Foto de portada: Unsplash